Cuando ocurre un daño en la piel por accidente o quemadura aparece una cicatriz. Las mismas pueden volverse más gruesas u oscuras, o incluso crecer más de lo normal.  Las quemaduras también pueden terminar en horribles quemaduras que pueden incluso afectar la movilidad de alguna parte de nuestro cuerpo.

 

El objetivo de la corrección de cicatriz es mejorar la forma de ésta . No se puede garantizar el resultado final de la corrección , aunque sea realizada con el mayor cuidado. Recuerde que la cicatriz puede permanecer enrojecida, inflamada e incluso dolorosa por un tiempo después del procedimiento, pues las cicatrices pasan por diferentes etapas de evolución.

 

En algunas ocasiones es mejor no operar debido a que bajo el criterio médico se cree que va a haber muy poca mejoría. Los problemas de circulación y enfermedades vasculares también pueden constituir razones para no reabrir una herida.

 

Una vez se haya tomado la decisión de realizar el procedimiento , el doctor le explicará qué tratamiento  le dará el mejor resultado.